Me consta
que el alcalde de Los Barrios ha reducido el número de concejales liberados en
su equipo de gobierno. Los concejales afectados por la decisión de la primera
autoridad municipal son María del Carmen Roldán, delegada de Juventud y Festejos,
y José Manuel Carrasco, delegado de Los Cortijillos, Sanidad y Consumo, que se
beneficiaban de una liberación en régimen de dedicación exclusiva. E Isabel
Calvente, delegada de Fomento, Empleo y Turismo, y Francisco Gil, delegado de Deportes,
que se beneficiaban de una liberación en régimen de dedicación parcial. Romero
firmó el decreto correspondiente el pasado 28 de noviembre y dicho decreto se
supone que entró en vigor el día uno del actual mes de diciembre.
Como soy
muy mal pensado, nada más sabido esto, hice mis cábalas y deduje que dicha
decisión, más que a una medida de austeridad, podía obedecer a una represalia
de Romero contra los cuatro concejales como consecuencia de presuntas tensiones
que se estarían viviendo dentro del grupo andalucista. ¿Y por qué?, se
preguntarán. Por la muy sencilla razón de que algunos ediles del PA, en público no, aunque
sí en privado, se han quejado y se quejan del talante autoritario del alcalde. Pero,
mira por donde, resulta que no. Que ni una cosa ni la otra. Según me comentan,
lo que ha hecho el señor Romero –o, mejor dicho, se propone hacer– es una
rotación entre estos mismos concejales liberados ya pactada previamente. Así
que, como se pueden suponer, la noticia, a la que yo creía que le iba a sacar
punta, se me fue al garete y mi gozo al pozo.
Roldán,
Carrasco, Calvente y Gil Salas estaban liberados y recibían retribuciones por
su diferente grado de dedicación como concejales con delegación dentro del
equipo de gobierno desde julio de 2011.
En la
actualidad, los miembros del grupo andalucista que mantienen su liberación con
cargo a las arcas locales, además del alcalde, son la teniente de alcalde Elena
Andrades, que también está liberada por Mancomunidad y percibe una pensión por
minusvalía; el presidente de la Junta de Distrito de Palmones, José Antonio
Gómez, y el concejal delegado de Urbanismo, Miguel Alconchel.
La
pregunta, no obstante, es obligada: ¿Por qué les toca la china a unos y no a
otros? Es decir, ¿por qué no le toca la rotación a la señora Andrades, por
ejemplo, que por tener tiene tres pagas? A su perfil académico y laboral no
creo que se deba, pues en eso no creo que supere en mucho a sus compañeros de
filas. Supongo que la respuesta ya la conocen… O se la imaginan.
Claro que
para rumores el que me soplaban días atrás y que me creo. Al parecer, hace unas
semanas unos trabajadores de la plantilla municipal sorprendieron a cierto
individuo muy allegado al primer edil tirándoles fotos mientras se encontraban
en el tajo llevando a cabo su faena. Hay quien sospecha que espiándoles, aunque
yo doy por sentado que lo que estaría haciendo el susodicho es tomar
instantáneas para un próximo boletín informativo del partido o del Ayuntamiento.
Ya se sabe que lo de hacer fotos a diestro y siniestro les mola a los
andalucistas desde los tiempos aquellos en los que se hallaban en la oposición.
Y, tal vez para no perder la costumbre, o por lo que pueda pasar, los muchachos
continúan con esa práctica.
Ahora lo
que sí que no me creo, por muy de fiar que sea quien me lo ha dicho, es que el
señor Romero tenga por ahí un paparazzi particular persiguiendo a los ediles y
a los que no son ediles del PSOE para ver si los pilla in flagranti conspirando. Sí, han leído ustedes bien. Nada más y nada
menos que un paparazzi. Aficionado, eso sí, pero paparazzi, a fin de cuentas.
¡Vaya tela!
La Verdad del Campo de Gibraltar, 30 de diciembre de 2013